*Este proceso, que se llevará a cabo antes de que concluya la actual administración, busca cubrir notarías en las regiones de Ajalpan, Tepexi, Puebla y Xicotepec
El Gobierno del Estado de Puebla, a través de la Consejería Jurídica, ha convocado a un concurso público para la entrega de cinco patentes de notaría en diversos distritos judiciales.
Este proceso, que se llevará a cabo antes de que concluya la actual administración, busca cubrir notarías en las regiones de Ajalpan, Tepexi, Puebla y Xicotepec.
El examen de oposición se realizará del 20 al 22 de noviembre de 2024 y será la oportunidad para que los aspirantes puedan demostrar sus conocimientos teóricos y prácticos sobre la labor notarial.
Los exámenes se llevarán a cabo en la sede del Colegio de Notarios del estado y se dividirán en distintas sesiones, según el distrito judicial correspondiente.
Fechas y detalles del proceso
La primera jornada, programada para el 20 de noviembre, será dedicada a los exámenes de las notarías 1 y 2 en los distritos judiciales de Ajalpan y Tepexi, respectivamente.
El examen para la notaría 1 de Ajalpan comenzará a las 10:00 horas, mientras que la notaría 2 de Tepexi lo hará a las 16:00 horas.
El 21 de noviembre se llevará a cabo la segunda jornada, con evaluaciones para la notaría 2 de Ajalpan y la notaría 33 de Puebla.
Los exámenes comenzarán a las 10:00 horas para Ajalpan y a las 16:00 horas para Puebla.
Finalmente, el 22 de noviembre se cerrará el ciclo con la evaluación para la notaría 2 de Xicotepec, programada a las 10:00 horas.
Requisitos y condiciones del concurso
Para poder participar en este proceso, los interesados deben cumplir con todos los requisitos establecidos en el artículo 59 Bis de la Ley del Notariado.
Es importante destacar que los aspirantes deben obtener al menos 80 puntos en el examen para ser considerados aptos para la patente de notario, de acuerdo con lo establecido en la convocatoria.
Un aspecto relevante de este proceso es que los resultados del concurso serán definitivos e inapelables, según lo dispuesto por la Consejería Jurídica.
Esto implica que una vez emitido el fallo por parte del jurado, no se podrán impugnar los resultados, lo que refuerza la transparencia y la objetividad del proceso.
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