Las ocho empresas acusadas de comercializar, diseñar y distribuir armas de asalto usadas por los cárteles buscan eludir una multa de 10 mil mdd
Las empresas fabricantes de armas en los Estados Unidos buscan pedir a la Corte Suprema estadounidense una audiencia para exponer su intento de escapar de la demanda de México por 10 mil millones de dólares que trata de hacerlos responsables de facilitar el tráfico de armas a los cárteles por medio de la frontera entre ambos países.
La apelación prevista fue revelada ayer durante una audiencia judicial virtual por un abogado de Smith & Wesson Brands después de que el mes pasado el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos, con sede en Boston, anulara la decisión de un juez que desestimaba el caso.
México alega en la demanda, presentada en 2021, que las empresas socavaron sus estrictas leyes sobre armas al diseñar, comercializar y distribuir armas de asalto de estilo militar de maneras que sabían que armarían a los cárteles de la droga, alimentando asesinatos, extorsiones y secuestros en el país.
El gobierno mexicano asegura que anualmente se trafican más de 500 mil armas desde Estados Unidos hacia México, de las cuales más del 68% son fabricadas por las ocho empresas que demandó, entre las que también se incluye a Sturm, Ruger & Co; Beretta, Barrett, Colt’s y Glock.
México dijo que el contrabando ha contribuido a altas tasas de muertes relacionadas con armas, a una disminución de la inversión y la actividad económica y a la necesidad de gastar más en aplicación de la ley y seguridad pública. Las empresas niegan haber actuado mal.
Andrew Lelling, abogado de Smith & Wesson, dijo en la audiencia del viernes que había una “posibilidad razonablemente buena” de que la Corte Suprema aceptara escuchar su apelación, y pidió al juez de distrito estadunidense Dennis Saylor que pusiera el caso en suspenso hasta que los jueces actúen sobre la decisión.
Dijo que la apelación se centraría en si los reclamos de México están prohibidos por una ley federal, la Ley de Protección del Comercio Legal de Armas (PLCAA), que brinda a los fabricantes de armas una amplia protección contra demandas por el uso indebido de sus productos.
El Primer Circuito dictaminó el 22 de enero que si bien la PLCAA puede aplicarse a demandas de gobiernos extranjeros, la demanda de México “alega plausiblemente un tipo de reclamo que está legalmente exento de la prohibición general de la PLCAA”.
El tribunal dijo que eso se debía a que la ley sólo estaba diseñada para proteger el comercio legal relacionado con armas de fuego, sin embargo, México había acusado a las empresas de ayudar e incitar a las ventas ilegales de armas al facilitar el tráfico de armas de fuego al país.
Saylor dijo que tenía “algunas reservas” acerca de suspender completamente el caso en espera de una apelación ante la Corte en una audiencia el 12 de marzo.
Con información de Reuters.
Comments