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Cierre de autopista México-Puebla obliga a autobuses tomar rutas alternas



Un fuerte impacto a las finanzas de la IP, que ronda los 131 mmdp, señala la Canacar; ejidatarios inconformes liberan un solo carril; hay diálogo; pierden hasta 6.5 horas en los desvíos

 

En tanto la Secretaría de Gobernación del Gobierno Federal mantiene el diálogo con los ejidatarios de Santa Rita Tlahuapan, las líneas de autobuses de pasajeros informan a los usuarios que anticipen sus salidas, pues las empresas toman rutas alternas y más largas.

 

La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) informó que ayer, la Segob, dependencia que está a cargo de las negociaciones, realizaría otra reunión in situ.

 

Por su parte, Estrella Roja indicó a sus pasajeros que los tiempos de traslado pueden ser de hasta seis horas y media ya que toman rutas alternas.

 

    En Estrella Roja continuamos con salidas entre Puebla y México, por la situación actual nuestros tiempos de traslado aproximados son entre cuatro horas y media y seis horas y media”, alerta la empresa.

 

Asimismo, piden anticipar las salidas, tanto de CDMX hacia Puebla y a la inversa. Mientras que la empresa ADO y sus filiales Cristóbal Colón y AU coinciden en que mantiene operaciones, pero con retraso.

 

    Hasta el momento, las corridas sí están saliendo, no han sido suspendidas, se están tomando rutas alternas, pero se tienen retrasos de más de tres horas en sus llegadas”, explica ADO.

 



 

En tanto, asociaciones de transportistas y comerciantes hacen un enérgico llamado a las autoridades para que se restablezca el diálogo entre ambas partes y se ponga fin al bloqueo.

 

La Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) estima que las pérdidas en toda la cadena de valor hasta ahora ascienden a 131 mil millones de pesos.

 

    El bloqueo de rutas estratégicas como el Arco Norte puede generar un efecto dominó en la economía nacional, retrasando entregas y encareciendo productos. La cooperación entre el gobierno y las comunidades locales es crucial para resolver el conflicto y proteger la competitividad del sector logístico mexicano”, dijo José Ambe, CEO de Logística de México (LDM).

 

La interrupción al servicio de transporte afecta alrededor de 100 mil unidades de transporte, incluyendo tráileres, autobuses y vehículos privados, detalló LDM en un comunicado.

 

Además, la pérdida económica que se estima es de 4 mil millones de pesos por cada día de bloqueo.

 

    Las mercancías que circulan desde y desde el puerto de Veracruz y otros destinos en el sureste del país, se mantienen, lo que podría generar escasez y aumento de costos en productos esenciales”, agregó Ambe.

 

LDM reconoce los esfuerzos de las autoridades, en conjunto con la Guardia Nacional y Capufe, que han permitido el uso de rutas alternativas; sin embargo, las soluciones han demostrado ser insuficientes para mitigar completamente el impacto del bloqueo.

 

    Los retrasos y desviaciones han afectado significativamente a las operaciones de transporte, encareciendo los costos logísticos y afectando la productividad de las empresas”.

 

Por Carla Martínez.

 



 

Inician las negociaciones

 

Los gobiernos federal y estatal empezaron anoche mesas de trabajo con ejidatarios que bloquearon la autopista México-Puebla y  otras vías terrestres, con el fin de dar respuestas a sus demandas de indemnización por usar tierras en la construcción de estas vialidades.

 

El secretario de Gobernación estatal, Javier Aquino Limón, y el encargado de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación federal, Tonatiuh Ramírez Guevara, empezaron las negociaciones, “a fin de lograr acuerdos para que las vialidades sean reabiertas lo más pronto posible”.

 

Los funcionarios federal y estatal destacaron su interés por privilegiar el diálogo y evitando mayores afectaciones a la ciudadanía.

 

Ayer, los ejidatarios abrieron un carril de cada sentido en la autopista México-Puebla, lo que permitió reducir el tráfico.

 

En las carreteras México-Puebla y México-Veracruz, además de la autopista Tlaxco-Tejocotal, los manifestantes optaron por mantenerse en los márgenes, sin entorpecer la circulación vehicular.

 

Sin embargo, el Arco Norte sigue bloqueado de manera intermitente a la altura de Calpulalpan, Tlaxcala, lo que ha provocado filas kilométricas de vehículos y el reclamo de empresarios que exigen que se libere la vía.

 

Esta manifestación empezó a la par de la registrada en Tlahuapan y ayer se cerraba dos horas y se abría otras dos, una secuencia que inició en la mañana y que continuó hasta anoche.

 

Aquino admitió que no hay fecha para la liberación total de la autopista México-Puebla, pese a que Andrés Manuel López Obrador dijo que habrá un pago justo.

 

En entrevista, el funcionario estatal consideró que el problema será resuelto gradualmente; pero, destacó que la administración federal vio con buenos ojos la decisión de los ejidatarios de reabrir un carril por sentido.

 

En la Central de Autobuses, las corridas tienen la advertencia de que los viajes de Puebla a la CDMX duran más de cuatro horas, prácticamente el doble del tiempo anterior a las protestas.

 

Ante tal situación, una buena parte de los conductores de las unidades de carga han decidido seguir por la ruta por Morelos para continuar hacia la capital del país, ante la posibilidad de que en cualquier momento pudiera retomarse el bloqueo.

 

Por Fernando Pérez / Corresponsal.

 



Tránsito en vía fluye a cuentagotas

 

A 21 horas de que ejidatarios de Santa Rita Tlahuapan liberaron un carril por sentido en la autopista México-Puebla, la circulación en esa vía aún es lenta.

 

Conductores que viajan desde la capital poblana hacia la CDMX reportan que el asentamiento de vehículos y tractocamiones en la autopista ya es mucho menor al que se observó desde la mañana del martes y hasta la tarde del jueves.

 

Ante esto, una opción que se está empleando es que si se viaja desde Puebla a la capital del país, hay que salirse de la autopista antes del poblado de Santa Rita para tomar la carretera federal y luego reincorporarse a la vía de cuota unos kilómetros adelante, en Río Frío.

 

    Va fluido todo el camino, sólo ahí en Tlahuapan si te desvías para Río Frío y luego te vuelves a incorporar a la pista le avanzas más rápido”, contó Eduardo Ruggeri, quien la tarde de ayer hizo el viaje en un autobús desde Cholula, donde vive, hasta la alcaldía Iztapalapa, donde residen sus padres.

 

Señaló que aunque en la carretera libre hay tráfico, se avanza mucho más rápido que sobre la autopista, que sólo tiene un carril libre por dirección.

 

    El chofer del camión ya se la sabía y en Santa Rita se salió y avanzamos bien. De repente en las curvas se veía la autopista y sí avanzaban, pero más lento que en la libre”, agregó.

 

Señaló que al llegar a la caseta de San Marcos el tránsito se vuelve demasiado lento, pero fluye mejor al cruzar el peaje. No obstante, las obras para construir el viaducto elevado del Trolebús Chalco-Santa Martha también afecta la circulación, ya sobre la calzada Ignacio Zaragoza.

 

Por Andrés Mendoza.

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