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El chile serrano, es uno de los chiles más usados en la gastronomía mexicana. Aunque es posible encontrarlo todo el año en los mercados, nada como tenerlo en casa. Aprende cómo cultivar chile serrano en interiores para que nunca falte el toque picante.
El chile serrano o simplemente chile verde, se diferencia del popular jalapeño, por ser más pequeño (entre 3 y 5 cm de largo y 1 cm de diámetro), aunque puede llegar a ser bastante picante. Pese a ser consumido principalmente inmaduro (verde), también es común verlo de color rojo, cuando alcanza su madurez.
Según el sitio Larousse Cocina, recibe su nombre porque empezó a cultivarse en la sierra de Puebla, Hidalgo y Estado de México. Actualmente es uno de los chiles más cultivados y usados en el país, crudo, cocido, asado, frito, para salsas, guisos o sólo a mordidas.
¿Cómo cultivar chile serrano en interiores?
Ya que el chile serrano es un básico de nuestra gastronomía, nada como tenerlo al alcance de nuestra mano. La buena noticia es que cultivarlo en casa es muy sencillo, únicamente necesitas:
* 2 o 3 chiles serranos
* Tabla de cortar
* Cuchillo
* Maceta
* Tierra para maceta
1. Quítales el rabo a los chiles, cortando unos milímetros de la parte superior.
2. Córtalos por la mitad a lo largo, tratando de no lastimar mucho las semillas. Para eso, elige chiles grandes, así una mayor cantidad de semillas se conservarán en buen estado.
3. Con cuidado, extrae las venas con todas las semillas de los chiles y raspa para sacar aquellas que queden en las paredes.
4. Con tus dedos, despega las semillas de las venas sin maltratarlas. Ojo, usa guantes de látex al realizar el proceso de extracción de semillas para evitar el contacto con tu piel.
5. Prepara tu maceta, recuerda elegir una con un buen drenaje. El canal de YouTube El Huerto en Casa, recomienda usar una tierra preparada con 30 por ciento de hojarasca, 10 por ciento de composta y 60 por ciento de tierra.
6. Esparce las semillas por encima de la tierra y revuelve ligeramente para cubrirlas. No es necesario enterrarlas muy profundo, sólo cubrirlas con una capa ligera de tierra.
7. Riega y coloca a la sombra, pero en un lugar con luz, aunque no directamente en el sol. Puede ser en una ventana donde le de la resolana.
8. La recomendación es regarla cada tercer día, cuidando que tu planta no se encharque.
9. En aproximadamente 15 días, comenzarás a ver los brotes. Una vez que las plantitas midan 20 o más centímetros, puedes trasplantarlas a diferentes macetas para que crezcan correctamente y con espacio.
Asimismo, fertiliza tu planta cada 22 días. De esta forma, es probable que 2 meses después de trasplantar comience a dar chiles.
¿Cuáles son las propiedades del chile serrano?
El chile serrano no sólo les brinda sabor a nuestros platillos, también propiedades. Entre ellas, la más destacada es el aporte de vitamina C, hasta 6 veces más que una naranja, un poderoso antioxidante que además ayuda a estimular nuestro sistema inmune.
La Procuraduría Federal del Consumidor, señala que el chile serrano no sólo es rico en vitamina C. Estas son otras de sus propiedades:
* Es rico en vitamina A, B y E, además de hierro y potasio.
* Tiene un alto contenido de betacaroteno, un antioxidante que cuida nuestro sistema cardiovascular e inmune, así como nuestra piel y ojos.
* La capsaicina, principalmente presente en sus semillas, ayuda a la quema de grasa durante el proceso digestivo.
* Puede acelerar el metabolismo hasta en un 25 por ciento, además de reducir el apetito.
* Tiene efectos antiinflamatorios y anticoagulantes.
Ahora que ya sabes cómo cultivar chile serrano en interiores, siembra tus semillas y disfruta todas las propiedades de este fruto, nunca faltará el picante en tus platillos.
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