¿Una afrenta a las feministas o una bella tradición? Te contamos sobre los distintos orígenes del Día de las Madres.
¿Qué se celebra el 10 de mayo?
El 10 de mayo, Día de las Madres, es una de las fechas más importantes para los mexicanos. En nuestro país la familia, especialmente las madres, es el centro de la vida social.
Por ello, la celebración del 10 de mayo o Día de las Madres tiene un fuerte arraigo, alcanzando distintas dimensiones, como la religiosa. Entre los católicos la veneración por la Virgen de Guadalupe termina por resumir la influencia e importancia de las madres en la vida de los mexicanos.
Antecedentes del Día de las Madres
Sin embargo, el Día de las Madres tiene un origen muy antiguo. Las primeras celebraciones de las madres se remontan a la Grecia clásica, donde se festejaba a la diosa Rea, madre de Zeus. Posteriormente, durante el imperio romano, la festividad se llamó Hilaria y se celebraba durante tres días en el templo de Cibeles.
Con la incorporación del cristianismo, la festividad se sustituyó por la de la Inmaculada Concepción, en dicha fecha se festejaba a la Virgen María y por consecuencia a la maternidad. Durante el siglo XVII, las festividades ligadas a la Virgen María y las madres comenzaron a evolucionar, y ya entonces se tenía una fiesta en la que se buscaban regalos para las madres.
Finalmente, el origen contemporáneo de la celebración del Día de las Madres fue en 1865, cuando la poetisa estadounidense Julia Ward Howe realizó manifestaciones de carácter religioso junto a madres víctimas de la Guerra Civil estadounidense propuso conmemorar el día como acto de reconciliación. Con ello, la reconciliación entre las madres víctimas se comenzó a conmemorar cada año en Boston.
Cuando la activista Ann Jarvis se enteró del fenómeno, decidió replicarlo en Virginia. Al morir en 1905, su hija homónima quiso hacer un homenaje a la labor de su madre como activista social y de la salud. Para lo anterior, comenzó a conmemorar el Día de las Madres el segundo domingo de mayo, fecha aproximada al aniversario luctuoso de su madre. Posteriormente, Ann Jarvis hija impulsó una campaña para el reconocimiento oficial de la fecha. El presidente estadounidense Woodrow Wilson tomó la iniciativa y el Día de las Madres quedó oficializado en 1914.
¿Cómo se originó el Día de las Madres en México?
El Día de las Madres se importa a México en 1922, como una iniciativa de Rafael Alducín, director del periódico Excélsior, quien aprovechó el medio para promover la nueva festividad. Posteriormente, José Vasconcelos, entonces secretario de educación, respaldó la propuesta en colaboración con la Cruz Roja y la iglesia católica.
Significado del 10 de mayo
Sin embargo, también se piensa que la celebración del 10 de mayo, el Día de las Madres, fue una respuesta reaccionaria ante el movimiento feminista. De acuerdo con Teresa Gutiérrez, con la nueva celebración se buscó “impulsar un discurso sobre la familia tradicional en el que los roles de cada integrante queden bien establecidos, especialmente el correspondiente al personaje de la madre”.
Según esta tesis iniciada por la feminista Martha Acevedo, en 1916 se celebró el primer congreso feminista en México en Yucatán. Entre las discusiones se encontraba el uso de preservativos y la decisión sobre la maternidad.
Con Felipe Carrillo Puerto como gobernador, el movimiento feminista yucateco se fortaleció. Por su parte, los conservadores iniciaron una campaña para contrarrestar el movimiento “inmoral” en favor de la procreación. Finalmente, el 10 de mayo se impuso ante la temprana oleada feminista mexicana. Entre las actividades realizadas por el periódico Excelsior se encontraban festivales que premiaban la maternidad prolífica y abnegada. Además, dicho periódico también sugirió la construcción del Monumento a la Madre, cuya construcción finalizó en 1949 bajo el lema “que nos amó antes de conocernos”.
Como es lógico, no hay fuentes oficiales que confirmen la tesis de Martha Acevedo sobre el establecimiento del Día de las Madres como una afrenta al movimiento feminista. Sin embargo, lo cierto es que la celebración ha superado sus propias dimensiones y en la actualidad va más allá de un solo discurso.
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