Por: @inforneutra
Todos en el morbo de ver y oir: ¿Quién robó más? ¿Quién amenazó a presidentes municipales? ¿Quién empoderó a violentadores? ¿Quién cobijó a factureros? ¿Quién pactó con cárteles en el paso diario? Y hasta quien sabe cuántas queridas saldrán será el ejercicio “democrático” del debate en la aldea…
!Viva la Democracia!
Grandes apelativos y acusaciones que desvarían la verdadera esencia, las propuestas, “el cómo y el cuánto”, las justificaciones a sus proyectos y ejes de gobierno… eso debería de importarnos, pero ¡NO!.
Nos gusta lo que ensucia, lo que hace ruido, el chisme, la mediocre cultura democrática en la que se apuesta a la desmemoria, siempre que hay elecciones es muy solicitada… dijeran por ahí, eso es lo que nos gusta, la pelea de chiquero.
“…Que si tiene una novia desde que empezó a disfrutar el poder, de que ha lavados miles de millones de pesos ayudado por instancias oficiales y antiguas amistades, que si su nieto es el hijo bastardo y deshonra de esa institución familiar de caricatura que se empeña en presumir, defendiendo a “su mujer”, que sacó las uñas, al ser vilipendiada del merecimiento que le darán una ubre plurinominal sin hacer campaña.
Del otro lado, el hijo prodigo de Mario Marín: “Este es mi hijo amado, en quien tengo complacencia; a él oído”, se ufana ese grupo, atrás las tropelías, y apuestan a la desmemoria, olvidan que la historia siempre se repite… es la máxima priísta hoy más vigente que nunca en el cuartel prieto le duela a quien le duela.
Lo que, si es raro, es que los dos principales se han “curado en salud”… recuerdo el “hoy, hoy, hoy” del bragado Fox y a la tibia "la vestida"…
Uno se desdice su marinismo, sin embargo ese ADN que le corre en la sangre, en las formas y en las maneras y ¡En el equipo!, el otro apela a su moralina pose, tibia y timorata, de godinez azul.
Así, los dos grandes, el tercero desde la trinchera naranja ni cuenta, el “nuevo” en la política, el hijo de tigre… ¡esquirol!, drogadicto corrupto, la vieja política es su ADN… y la vergüenza de sus padres es la constante.
Una cosa es cierta, lo que digan estos tres “Pro Hombres” de la política no cambiará nuestro voto de rechazo o de simpatía, uno perdió el rumbo, al ser una autoridad que ya no era ninguneado ni llevaba la bota de Rafa Moreno Valle en el cuello, se sintió libre y ese “indio ladino” que lleva dentro, afloró en todo el uso y disfrute del poder, perdió piso y humildad, producto de la cultura del esfuerzo.
El otro, un “junior vividor” y con sus “problemitas” que lo persiguen y conviven con él… que la huella de la extorsión a cuanto alcalde y secretario de Estado se dejara a nombre de su padre no lo dejará de acompañar…
Y el que falta, ese procer de la democracia aldeana que se siente todo un demócrata, rodeado de hombres probos, con calidad moral de censurar, bloquear y hablar de “servir al Puevlo Vueno” el Rafita de Acatzingo, que resurge de las cenizas, lleva en la frente la marca de la bestia marinista, esa indeleble marca de haber sido parte medular del grupo más deleznable de la historia política de Puebla, ahora, con su mesiánica retórica cree que puede borrar ese pasado tricolor prieto muy presente en el respetable…
De que estará bueno el debate en la aldea estará bueno, los pistaches, una cubeta de palomitas y la consabida coquita con hielo serán mi compañía perfecta, a los que les gusta el trago puede ser que los cacahuates con ajo en el bar sean los acompañantes y si es usted de los equipos de cualquier candidato ya de a perdida los huesitos y pepitas celebrando el ataque o respuesta de su patrón desde la casa de campaña…
Que disfrutemos el “debate” todos los ciudadanos de bien no cambiara nuestra opinión de toda la clase política, puro vividor de nuestros impuestos y despreciables como seres humanos, ojetes, pues el abuso de poder fue, es y será l constante mientras gobiernen…
Todos son iguales, solo que el color creen que los cambia… pero en el fondo el priista es priista y el panista es panista… y el que es rata, en el color que le toque en el proceso electoral a donde brinque…
Dijera el clásico ¡Fuera máscaras!.
Esperemos que todos los candidatos dejen de hacerse pendejos y de verdad piensen en nosotros y no solo en tener el poder por poder, que recuerden que se vuelven nuestros empleados y que cualquier reclamo debe ser atendido puesto que ellos y su gente cercana van a tragar de los que nosotros generamos…
¡Oh sí!
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