Por: @inforneutra
No tiene mácula alguna que lo señale como muchos que arrastran pasados oscuros, harto "conocido, reconocido y respetado", pero carente de un equipo que sepa al 100 las lides de una campaña eficiente, no dejan de ser unos jala cables, haciendo quedar mal al jefe en su primera presentación, esto se proyecta como un talón de Aquiles, esperemos les recete una buena llamada de atención y que pronto sanen esas carencias.
Dice ser un candidato ciudadano, cierto es que en la calle lo miran lo reconocen y hasta foto le piden, lo saludan, sin tapujos ni pose sin fanfarrones que lo escolten… un hombre simple, así es el doctor José Antonio Martínez García, todo un “Doc star”.
Alejado de esa malicia y la soberbia que enarbolan los políticos comunes que buscan la próxima elección, en que su modus vivendi es la tranza, el cochupo y saqueo… todos, han dado los mismos resultados, la misma decepción, la misma vergüenza.
La fauna de los medios que forman parte del ambiente reporteril de la vieja guardia lo rodean como moscas a la miel, prenden una nueva veladora pidiendo a su santo de confianza para que llegue y les dé un “apoyito” más grande.
El hombre que era la cara afable del barbosismo (y de lo mejor que había), al hombre que le debe el Estado poblano, esos primeros lugares en manejo positivo de la pandemia por covid 19, ya metió dudas a los demás aspirantes, como proctólogo que viene atrás de ellos.
¡Aguas!, en Puebla y en el país ya han habido malas experiencias de estos garbanzos de a libra en el medio político, con esos salvadores y que tienen la solución para todo, y llegando, tienen los miles de pretextos. El camino al infierno, está lleno de buenas intenciones.
Al “Doc” le espera un escenario sorpresivo en las mediciones que desdeña, pues su trabajo a ras de tierra se basa en hacer el verdadero bien a la gente, largas jornadas médicas, de caminar por horas en las inhóspitas regiones de Puebla lo demuestran, la pobreza que le habló de frente lo hace ver un estado lacerante y herido, siente que puede hacer algo por esa gente, la gente pobre que ha sanado, la malicia no anida en él, por lo menos hasta ahorita en lo visto… pero se involucra en un ambiente que no conoce, del todo...
Traiciones, puñaladas, mentiras, simulaciones y lo peor… se enfrenta a la lealtad o deslealtad del círculo que lo encumbró como el mejor funcionario del gobierno barbosista.
Hay quienes ven los hilos de la viuda moviendo, sin embargo el “Doc” tiene su propio prestigio, su propia personalidad y sobre todo su ascendencia en la sociedad poblana… en el camino encontrará su punto de quiebre en seguir dependiendo de alguien externo o volar solo… ¿Podrá?
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