Por: @inforneutra
Ayer, al entrar al “Palacio Morisco”, atropellando a medio mundo, con aires superioridad y soberbia, diciendo: “Somos los herederos del Barbosismo”…
Decían que eran diferentes, pero al ver esa entrada “triunfal” de los restos del barbosismo para rendir cuentas, ya vimos que lo que dejó Barbosa en los suyos, es esa falsa modestia y de sobra mucha soberbia.
Mareados en ladrillos, sus herederos
Todos su “gatos y gatas” se han creído vicegobernadores… o en su defecto súper asesores con pésimos resultados y nada que comunicar...
Que mensaje manda el primo “putañero”, ¿haciéndose acompañar de la viuda? y ¿Qué tiene que ver Citlalli Hernández?… ¡Somos el verdadero poder!… así lo quisieron dejar claro ayer.
Luego de que, a fuerza, lo han metido en la puja por suceder, al “Legado”, al “Pro Hombre”, al gran “estadista” ese estadista que mantuvo a Puebla en el fondo de la tabla en muchos parámetros la imagen de ayer deja mucho que decir, solo no podría…
El “Primo” se empodera con la espada del “Barbosismo”, hecho de cascajos, casi extinto y totalmente replegado, y solo brilla en el discurso del Pinocho de Tepeaca a diario quien por cortesía lo tolera…
Acostumbrados muchos de su staff, al tronido de dedos y a la humillación, hoy disfrutan esa paz, de no tener la bota en el cuello… por cierto una bota nada más.
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