Por: @inforneutra
Así, sin pudor y sin miramientos al falso feminismo de escritorio y de redes sociales de la aldea… “La burra” así le dicen, le dijeron y le seguirán diciendo a la flamante auditora poblana misma que mujeres del gabinete y en el Congreso, decían, dicen y dirán, “No maaaa... ¿la oíste?, ¿visteeee?, no maaa… “eso quiere Barbosa... estamos fregados"... repito eso corría en las pláticas entre mujeres.
¡Tan mal está la titular de la Auditoría Superior del Estado de Puebla que hasta varias diputadas que no brillan por sus grandes logros la critican!
Ahora bien, entre la clase política todos se sorprendieron del ridículo nacional que fue, es y será nuestra “flamante Auditora”, por cierto impulsada por el barbosismo, quien en esa camada de la “nueva clase política” que muy orondo el trece uñas cacareaba desde “La Marranera” impulsó…
Pero también, pocos sabían, del círculo cercano, del porque un perfil tan mediocre había llegado, sabían “por qué y para qué llegó”, el fin y el trasfondo entre ellos el árabe mafioso que era el que operaba las finanzas desde el Congreso al ex gobernador.
Por eso extraña tanta la dilación del Poder Legislativo poblano para que Amanda Gómez Nava sea llamada a rendir cuentas y explique tantos “errores técnicos” y la “No justificación y comprobación de movimientos de grandes montos”…
“Amandita” con la complacencia de la familia Barbosa y Huerta ejerció ese gran abuso de poder y una carencia y/o debilidades de los procedimientos y mecanismos institucionales, que garantizaron la transparencia en el ejercicio de las funciones del gobernador Barbosa… con omisiones y saqueos al “por mayor”…
En pocas palabras ¡impunidad para robar!
Por eso a “El Chal” los constantes ventarrones que se han dado en la Angelópolis lo han llevado a caer en los tendederos de la 13 donde se están secando, y sacando, las cuentas del barbosismo…
Hoy muy denostada, la doble moral legislativa viene a ser uno de los puntos álgidos en tiempos electorales, la percepción que hay es que se queda corta y esconde la cabeza en el excusado ante el riesgo que viene para el cierre de gobierno, nadie y mucho menos el gobernador Sergio Salomón Céspedes quiere y va a cargar en campaña con las denostaciones por corrupción y omisión del manejo de los dineros en tiempos del barbosismo que van contra el apostolado nacional morenista de “NO ROBAR, NO MENTIR, NO TRAICIONAR”.
Podrán presionar y trabajar a todo vapor para lavarle la cara y justificar el robo hecho a las arcas del erario poblano por parte de Luis Miguel Gerónimo Barbosa Huerta y su camarilla, sin embargo las cuentas públicas no tendrán jamás la “Legitimación Social”…
En este gobierno de la “transformación”, desde el Poder Legislativo tendrán en el quorum logrado el ser aprobadas por mayoría, pero bien saben todos los involucrados, que es una vil mentira…
¿Cuánto les tocará del botín a cada cómplice de esas trapacerías?
Sobras para comprar camionetas que solo veían en las revistas de la estética de su rancho o en su caso seguir con desarrollos inmobiliarios a lo largo del país
¡Viva la 4T!
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