*El general Ignacio Zaragoza, es el ejemplo de que con valentía y determinación se puede cambiar el curso de la historia
Al hacer uso de la tribuna en el Congreso Federal, en el marco del 161 aniversario luctuoso del General Ignacio Zaragoza Seguín, Javier Casique Zárate mencionó que la libertad, la independencia y la soberanía no fueron concesiones ni obsequios obtenidos de la nada sino el resultado de diversos acontecimientos que conforman en su conjunto lo que hoy reconocemos como parte de nuestra identidad.
Señaló que la batalla del 5 de mayo de 1862 representa la historia de un pueblo que decidió tomar las riendas de su destino. Esa batalla fue encabezada por el general Ignacio Zaragoza Seguín, mismo que recibió un homenaje póstumo por parte de las y los diputados federales, a 161 años de su fallecimiento.
Hombres como el General Ignacio Zaragoza son los que se necesitan para la construcción de una patria de valores, que forjen a hombres y mujeres hermanados por su deseo de una sociedad más justa, dijo.
Juárez entendió la magnitud de la victoria en Puebla y reconoció a Zaragoza y a sus valientes soldados como héroes de México.
Esa victoria se ha convertido en un símbolo de la resistencia y la determinación de un pueblo que se negaba a ser sometido.
En su exposición Casique Zárate hizo énfasis en que el General Zaragoza se convirtió en un faro de esperanza en tiempos oscuros, un líder que nos recuerda que ningún desafío es insuperable cuando se lucha con pasión y patriotismo.
Mencionó que, como representantes del pueblo, es un deber fomentar el reconocimiento a las mujeres y los hombres que serán ejemplo para las generaciones futuras.
Para finalizar señaló que, en este mes de septiembre, conocido como el mes patrio, es importante rendir un homenaje póstumo a un hombre sin el cual no se puede explicar la historia de México. El general Zaragoza, con su espíritu patriótico y su liderazgo incuestionable, representa la lucha constante por la independencia y la libertad de México, concluyó.
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