AMLO detalló que lo que más le importa es que sea el pueblo quien elija a jueces y ministros
Andrés Manuel López Obrador declaró ayer que no se opone a un relevo gradual en el Poder Judicial, pero no deben aplicarse retrasos en el proceso.
Luego de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) e integrantes del Consejo de la Judicatura y magistrados participaron en la inauguración de los Diálogos Nacionales sobre la Reforma Constitucional al Poder Judicial en la Cámara de Diputados, López Obrador expresó que será decisión de los legisladores, sin embargo, éstos no deben “aplicar la táctica dilatoria”.
No me opongo (relevo gradual) , yo creo que lo fundamental es que se lleve a cabo la reforma y que el pueblo participe en la elección porque el pueblo tiene un instinto certero, es sabio, prefiero que sea el pueblo a que sean las cúpulas las que decidan”, respondió.
López Obrador reconoció la participación de los integrantes del Poder Judicial y celebró que reconozcan que hace falta una reforma.
Es digno de reconocimiento que ellos acepten que es necesario el que se reforme el Poder Judicial. Con el diálogo se puede llegar a acuerdos, pero ya he estado escuchando, primero que aceptan la reforma, ya que ellos consideran que se debe de hacer la reforma, eso es un gran avance, porque si hay voluntad de cambio se avanza mucho”, destacó.
AMLO sugirió que en la reforma se considere que los actuales ministros de la Suprema Corte puedan participar en la elección para que se sometan al escrutinio público.
También que por austeridad sólo se realice una elección y aplicar la paridad de género en el Poder Judicial, ante el hecho de que existe la equidad en los poderes Ejecutivo y Legislativo.
Paridad es momento para que sean 50 mujeres y 50 hombres, mitad mujeres mitad hombres, porque en el Poder Judicial hay mucho desequilibrio, son muchos hombres, no así en el ejecutivo y en el Legislativo”, destacó el titular del Ejecutivo.
Cabe recordar que el jueves, Andrés Manuel López Obrador reiteró que su reforma consiste esencialmente en que los jueces, magistrados y ministros puedan ser elegidos por el pueblo a través del voto popular para evitar la corrupción y en la desaparición de los fideicomisos que actualmente se tienen, y los derechos de los demás trabajadores del PJ “están garantizados”.
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