Por: @inforneutra
Resulta falaz, hablar de lucha contra la corrupción o seguirla señalado en los discursos, al “pasado” de Puebla.
Si revisamos... todos han y se han amamantado de todos.
Todos andan con la cara tiznada, la cola como de rata de cocina de restaurante, larga y gorda… y en la mirada se le nota “el pecado”.
La Nueva Clase Política poblana es el “Chapulinazgo”, que en teoría no tolera la 4T
Casi todos han brincado de ubre en ubre, puros, solo una o dos… y para ejemplo de alguien "puro" la vituperada Claudia Rivera Vivianco.
Dicen los super-asesores a priistas y panistas habidos de poder: “salte de ahí”, apoya abiertamente a “fulano”, “rompe tu credencial del partido en público”, y mínimo serás regidor…
Gran sello de ingratitud es el que los tizna para siempre, los puestos tienen vigencia, el desprestigio de ser un chapulín se queda hasta que mueran.
Atrás quedaron los “ismos”, los tatuajes en la frente y las camisetas bien puestas, esa filiación que daba cierto status y se defendía a ultranza… atrás quedó para la historia y las fotos que se rescatan de la memoria digital y que solo confirman una cosa… “Una persona tibia, no es confiable en la vida.”
Lo de hoy lo de hoy, es saltar, cual vil chapulín en la milpa, chupando el presupuesto como sanguijuelas, tirados en la sombra del poder como viles cigarras.
El “Rey Chapulín” que nos gobierna, es un gran ejemplo a seguir.
La sobrevivencia y la ubre quincenal, bien vale la desvergüenza, mientras tengan la tripa, para ellos y su prole, lo demás no importa.
La característica de esta “Nueva Clase Política”, es que siempre tienen la mirada perdida en el piso.
Pues no pueden levantar la cara, para levantarla, hay que tener congruencia y dignidad... y esas, se perdieron de tanto brinco
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